sábado, 8 de mayo de 2021

Reseña Coda (José Antonio Cotrina)

Título: Coda

Autor: José Antonio Cotrina

Saga: El ciclo de la Luna Roja 4/4

Editorial: Lo maravilloso

Encuadernación: Tapa blanda

Precio: 21,50 €

Número de páginas: 633

Sinopsis: Todavía quedaba una última historia por contar. Tras La sombra de la Luna surgió un nuevo reino, una Rocavarancolia dispuesta a todo por enterrar su pasado sangriento.
Pero no será fácil. Sus enemigos acechan, tanto dentro de la ciudad como fuera. Los mundos que se aliaron para derrotarla hace treinta años han regresado. Y esta vez no pararán hasta arrasarlo todo.
¿Podrán afrontar las nuevas cosechas los peligros que se aproximan? ¿Serán capaces de escapar del legado terrible del reino o no les quedará más remedio que abrazar de nuevo la oscuridad para salir victoriosos?
Es hora de volver a Rocavarancolia. ¿No la oís? La Luna Roja os está llamando.

Opinión personal: Aquí concluye mi viaje. No solo por Rocavarancolia, sino por este mismo blog, mi pequeño rincón desde hace 11 años que tantas alegrías me ha dado, entre ellas, la mayor de toda mi vida. Pero, como toda etapa, también debe tener un final; en realidad, esta etapa se cerró hace tiempo, pero nunca me había atrevido a verbalizarlo ni a ponerle punto y final de manera oficial. La Luna Roja ha cambiado eso.
Cuando terminé Coda me removió tanto, me había dejado tal sensación durante y después de la lectura, que al poco de seguir pensando en la saga comenzó a abrirse paso un pensamiento en mi mente: ¿por qué no hacer una reseña de Coda? ¿Por qué no, ya que hablamos de finales, hacer una última reseña para el blog? ¿Un último broche que cierre el ciclo de manera perfecta?
No puedo pensar en un final mejor para mi blog, de modo que me despido de la mano de Cotrina (y, ya de paso, me quito la espinita de no haber reseñado ni la trilogía anterior ni La canción secreta del mundo. Sorry, Cotrina).
Sed bienvenidos a Some day, some place... some time. Sed bienvenidos por última vez.

Esta ni siquiera va a ser una reseña al uso. Puede que ni siquiera sea una reseña como tal, sino quizá una manera de volcar en palabras lo que ha supuesto para mí este último viaje a Rocavarancolia. Así que esta vez no voy a hablar de trama, narración, ritmo, etc.; ese tiempo ya pasó. Esta vez voy a hablar de sentimiento, de entrañas, de sensación. De corazón.
Así que, querido amigo lector, si no has leído El ciclo de la Luna Roja, no te recomiendo que sigas leyendo esto. Esta última vez tampoco quiero contenerme a la hora de hablar del libro, por lo que puede que se me cuele algún que otro spoiler. Puede que ni siquiera debas leer esta reseña a no ser que hayas terminado Coda.
Edito: afirmo. Cuidado con los astrios spoilers.


'Las leyendas mienten. Esa es también parte de su esencia. Tejen capas y capas de mentira sobre la verdad hasta hacerla irreconocible. Muy pocas leyendas se atreven a enturbiar las virtudes de sus héroes. A estos se les permite ser crueles con el enemigo pero nunca con los suyos.'


Coda nació como Los cuentos de Rocavarancolia. Cada 31 de octubre, el autor nos deleitaba con un nuevo relato, continuación directa de La sombra de la Luna. Pequeños esbozos de un futuro que, a día de hoy, se han convertido en leyenda. La verdad es que no sabía cuantísimo echaba de menos a la saga y a sus personajes hasta que me he metido de lleno en la historia de nuevo. Y hasta que la historia, la ciudad de los portentos y su luna imposible se me han metido de lleno en las venas y en el alma.
Ha sido una manera maravillosa de amenizar (y sufrir) estas últimas madrugadas, momento en el que más me apetecía volver a pisar las calles de Rocavarancolia. Ahora ya he tenido unos días para reposar y asimilar el ¿final?


Mi reencuentro con los personajes ha sido como encajar la última pieza de un puzle. Dama Sedalar, Marina, Héctor... Hasta dama Araña y dama Desgarro. Pero, sin ninguna duda, la auténtica revelación fue redescubrir a Andras Sula. Un personaje que en los tres libros anteriores no me generó tanta atracción; es más, diría que hasta me caía un poco mal, era demasiado... "inestable" (miento, nunca se es demasiado inestable. Y menos tratándose de Rocavarancolia).
Sin embargo, en esta ocasión, me ha cautivado prácticamente desde el principio. Y cuanto más avanzaba la historia, más quería saber de él. De sus cosechas, sus pensamientos, su relación con Ceniza, su futuro. Sin ninguna duda, para mí se ha convertido en el mejor personaje de toda la saga gracias a su carisma, a su magnetismo y a ese punto de locura. Larga vida al piromante de Rocavarancolia.

También me ha encantado conocer a las nuevas cosechas de Andras Sula, sobre todo a Alba, Haidar, dama Eco e Hiroki (a pesar de que este último apenas hace acto de presencia, pero algo me dice que le aguarda un futuro espléndido). Incluso Tifón y Roto. La lista del resto de cosechados es bastante larga; algunos pasan sin pena ni gloria; otros, aunque no tan relevantes, se terminan ganando un huequito en tu corazón. En el fondo, pocos de ellos trascienden a la trama. La gloria solo está reservada para unos pocos.

Respecto a los personajes principales, solo tengo una espinita clavada: Héctor. Habría sido espectacular verle en todo su esplendor como ángel negro. Lógicamente, Héctor no estaba aún en ese punto (y tampoco debe tratar de "sustituir" a Esmael) pero sí esperaba ver cierta malicia en él, más oscuridad. Supongo que tendré que seguir esperando.

No puedo cerrar este apartado sin hacer una mención especial a mi tocaya: Diana. Respecto a ella, yo solo pedía dos cosas al autor: o bien transformarme en algo guay (a ser posible en bruja o piromante, gracias)... o bien tener una muerte apoteósica. Aún no tengo claro cómo sentirme al respecto, una de cal y otra de arena.


Algo que me ha llamado poderosamente la atención es constatar el hecho de que, efectivamente, Rocavarancolia está viva y se nutre de sus habitantes. Cuando las cosechas reconstruyen la ciudad, me alegré de ver una nueva faceta de la misma, quería conocer esa ciudad en su edad dorada. Pero tras la inauguración, no podía alegrarme sinceramente, tenía la sensación de que algo no estaba donde debía estar. Rocavarancolia no es plenitud.
En el momento en que Astria comienza la invasión, en el momento en que comienza a destruir la ciudad, por mucho que me dio pena ver tirado todo el esfuerzo y las ganas de sus habitantes, algo por fin hizo clic. El momento en que la verdadera ciudad asomaba entre sus cenizas. Rocavarancolia es fuego, es muerte, es destrucción. Rocavarancolia es oscuridad.

Y eso es lo que define a Principios. El resurgir de la oscuridad, el nacimiento de la antigua y nueva Rocavarancolia. Como me ha ocurrido con Andras Sula, Principios es, sin lugar a dudas, mi parte favorita de Coda. En especial el quinto capítulo de la segunda parte (también mi favorita, dentro de Principios). Magistral. 
No en vano la cita que encabeza la reseña pertenece a esa parte.


Es aquí cuando el viaje llega a su fin y se acerca el final. Pero yo no puedo despedirme de esta ciudad prodigiosa ni de sus gentes aún. No puedo. Y menos aún después de la Coda dentro de Coda. Un epílogo que se hacía necesario y me parece el broche de oro perfecto para cerrar el ciclo que ha supuesto este viaje, al igual que el demiurgo que es asesinado por la criatura a la que dio vida (no se me escapan estos detalles de los relatos y que tengo la esperanza de que sean intencionados y no meros frutos de la casualidad).

Lo primero que me sorprende del final es el salto temporal. No se me habría pasado nunca por la cabeza. Y aquí mi imaginación comienza a abrir un sinfín de puertas y posibilidades.
Si, a pesar del salto temporal, dama Sedalar únicamente se hubiese ceñido a cosechar de nuevo a Héctor, entonces doy el viaje por finalizado. Asumo que, como ya sabéis, al final todos mueren. Pero no solo eso, sino que hay otros dos saltos temporales más. Mi imaginación ya da palmitas en la oscuridad.
En uno de estos saltos (aunque al final no sea relevante), Andras Sula y Haidar desaparecen. ¿Qué? ¿Cómo? Dama Sedalar, ¡cuéntame más, por favor!

En el último salto, Rocavarancolia vuelve a estar en guerra; nada nuevo, por otra parte. Pero es el detalle anterior, sumado a los saltos temporales lo que, lejos de ayudarme a dar por acabada esta ciudad increíblemente oscura, me hace desear más de ella. Entiendo que no es relevante todo lo ocurrido en ese tiempo (por mucho que me muera de curiosidad) y que la historia, al fin y al cabo, ya está contada. Pero...
Pero.

Pero, y ahora me dirijo a ti, Cotrina. ¿De verdad nos vas a dejar con la miel en los labios de ver a unos Andras Sula, dama Sedalar y Héctor adultos sumidos en Rocavarancolia? Ni tú eres tan cruel y lo sabes, o eso quiero creer. Es en este punto de aceptación de Héctor donde finalmente podría aceptar su naturaleza (o al menos parte de ella) como ángel negro. Donde los antiguos mundos de la Alianza y quizá otros nuevos, se las tengan que ver con el resurgir de una Rocavarancolia oscura bajo el mando de Andras Sula.
Entiendo que no haya más allá después de la cosecha de Héctor, se trata del fin perfecto de un ciclo y como tal debería mantenerse. Pero... ¿y esos casi 20 años de diferencia?
Me ciño también a las propias palabras del autor al inicio de la novela, donde él mismo afirma que, a pesar de ser su intención, no puede prometer que Coda sea el final. Desde luego, para mí no lo ha sido, y me alegro por ello. Ya en su momento, Los cuentos de Rocavarancolia no iban a ver la luz en papel. Hoy, unos 10 años después, tengo Coda entre mis dedos.


Imposibles que resultan ciertos. Finales que, en realidad, son principios. Y mientras siga existiendo esa minúscula luz en las tinieblas, yo me aferraré a ella. Quizá, el próximo 31 de octubre, esta luz haya crecido y se haya hecho más grande. Quizá, un 31 de octubre se escuchen los tambores de guerra anunciando las historias que están por contar.

Quizá, la noche del próximo 31 de octubre vuelva a ver pájaros de fuego (o mariposas de cristal) volar sobre mi ventana. Hasta entonces, la luz seguirá brillando. Hasta entonces, esta despedida no se trata de un adiós, sino de un hasta luego. 

Hasta luego, Rocavarancolia. Hasta siempre, Some place, some day... some time.
Gracias por tanto. Gracias por todo.

viernes, 23 de marzo de 2018

Entre citas 39

Buenas tardes a todos. Cuánto tiempo, ¿no?
Sí, lo sé. Estoy super desaparecida. Tengo el blog con telarañas, el Twitter con telarañas. Y eso es bueno. Sí. ¿Por qué no? ¿No es lo maravilloso de esto? Un hobby, algo que contar, simplemente cuando quieras y te apetezca. Y eso hago. Y, aunque a veces me gustaría escribir más, simplemente, no tengo nada que decir ;)

Pero, esta vez, no he podido resistirlo. Actualmente me encuentro leyendo una novela de un autor llamado David Safier. El libro en cuestión se titula Más maldito karma. Por ahora, no me parece tan desternillante como la primera parte, pero me hace pasar un rato agradable, ameno y entretenido. Quizá haga reseña de Maldito karma. Quizá sí, quizá no. No lo sé (por Dios, qué críptica estoy hoy, más de lo habitual xD Será el zenismo del karma, je).

En fin, que acabo de llegar a un pasaje del libro con el que he conectado mucho. Y este fragmento, en cuestión, me parecía digno de ser compartido, pues estoy muy de acuerdo con él, además de ser necesario que, de vez en cuando, nos recordemos que todos somos especiales, dignos, válidos. En definitiva, únicos:

'La existencia es tan sumamente poco probable que cada persona es un milagro.'


¡Buen fin de semana y buena Semana Santa!

martes, 31 de octubre de 2017

Crocheteando: Wooper con queso

¡Hola a todos! ¿Cómo estáis? Espero que os vaya de maravilla y el otoño os siente bien. ¿Y a quién no? Calabazas, el aroma de las castañas asadas, las hojas caídas y mudando colores, el frío... Ay, yo soy una enamorada del otoño. Otoño. Lo repito porque me encantan la palabra, su sonido y lo que implica. Otoño.

En fin, que yo venía hoy, por fin, tras mucho demorarlo a presentaros a uno de mis nuevos inquilinos lanudos ;)

Uno de los Pokémon de agua que más me gustan, chan chan: el salaísimo Wooper con queso.

La antena izquierda no pilla muy bien el wifi


Pues aquí está él, muy monoso. No me convence una de las pupilas, pero oye, para lo que odio hacer esos detallitos precisos a lana, no me quedó del todo mal. 
Así que nada más, esto es todo ^^

¡Que paséis un feliz Halloween!


PD: ¡Oh, y para quien no lo sepa, también hago (y vendo) unos llaveritos de estrella y pulpitos! Si queréis saber más, tan sólo tenéis que pinchar en este enlace para las estrellas, y en este otro para los pulpitos ;)

viernes, 20 de octubre de 2017

Reseña Lo que habita dentro (Malenka Ramos)

Título: Lo que habita dentro

Autor: Malenka Ramos

Editorial: Plan B

Encuadernación: Tapa dura

Precio: 19,50 €

Número de páginas: 552

Sinopsis: Octubre 1987 San Petri (Costa de la Muerte). En la noche de brujas (Samhain) un grupo de niños entra en la antigua casa Camelle, un lugar abandonado del que se cuentan terribles leyendas. Pero la casa guarda un oscuro secreto y un pozo. Un pozo del que pende una bombilla que no debería haber funcionado. Cerrado por una tapa de metal que jamás debieron abrir. Porque había unas escaleras de metal para bajar (pero también para subir), un sonido sibilante y algo más...
"1, 2, 3, yo os atraparé".
Es a partir de ese momento cuando nada vuelve a ser como antes. Las noches se convierten en una lucha por sobrevivir a las visiones, los arañazos en el armario y los sonidos bajo la cama. Dos de los chicos desaparecen y algo les persigue.
"Tengo piedras, Enma... Muchas piedras...".
Actualmente todos esos niños y niñas son adultos pero jamás se han podido desprender de sus visiones y de los terribles acontecimientos que vivieron siendo tan jóvenes. Casi treinta años después las pesadillas son más intensas. Creían haberse librado de lo que salió del pozo pero por alguna razón, vuelve otra vez para recordarles su oscura juventud.
La casa Camelle está en obras y alguien ha abierto el pozo... Los mensajes y las visiones de niños fantasmales les persiguen con más intensidad.
Él ha vuelto... Bunny, el cruel...

Opinión personal: Cuando vuelven a repetirse los acontecimientos que tuvieron lugar en otoño del 87 en San Petri, los antiguos implicados, Dani, Claudio, Lisa, Enma y Cedric, apodados Los Supersónicos, no dudan en dejar atrás sus temores infantiles y volver a ponerse en contacto después de tantos años en silencio. Dos niños más han desaparecido en extrañas circunstancias y les aguarda un destino atroz: piedras en el estómago y la muerte; esta vez, los Supersónicos piensan enfrentarse a su mayor terror de una vez por todas. 


Es mi primera incursión en el género del terror y, a pesar de tener mis quejas y decepciones, la experiencia ha sido más que grata; sin duda repetiré, ya que, de un modo u otro, Bunny no me ha decepcionado.

La acción se desarrolla en distintos escenarios temporales: por un lado tenemos noviembre de 1987 en San Petri (Galicia) y, por otro, octubre de 2016 en distintas localidades españolas, destacando San Petri. Sin duda esta novela toca diversos géneros literarios, siendo realmente una combinación de terror, suspense y fantasía en la que confluye un tema trascendental: la maldad inherente al ser humano.
Sin embargo, Lo que habita dentro también peca de tópicos muy vistos en este tipo de historias: casa abandonada con pozo incluido, dudosas prácticas en un sanatorio, etc (al menos, no hay ningún cementerio o genocidio). Aun así, la historia sí consigue transmitir terror y malestar, tanto Bunny como sus actos son realmente siniestros, y es que, ¿qué mejor manera de aterrorizar sino mezclando dos elementos tan inocentes e inofensivos, como son los conejos y los niños, y retorcerlos hasta crear algo macabro?

Un punto negativo a tener en cuenta es la falta de explicación, contradicciones o lagunas que quedan al finalizar la historia, ya sean deliberadas o por descuido de la autora. Es decir, algunas forman parte del aura de misterio que rodea a Bunny y, de hecho, se agradecen (tampoco hay que dárselo todo masticado al lector), pero otros aspectos me han parecido fundamentales para llegar a comprender el funcionamiento de Bunny al completo. Por ejemplo:

¿por qué la agente puede ver también a los niños con bolsas?; entonces, ¿funcionan de manera diferente a Bunny? Si Bunny no puede matar físicamente... entonces, ¿quién demonios asesinó a los niños, y por qué sí pudo matara Kevin? ¿Por qué la cicatriz de Dani también tiene relación con el fantasma de su hermano? ¿Monitores en 1921? (¿Seriously?).

También quiero mencionar la existencia de dos romances en la trama. El primero se encuentra latente, trabajado y fluye de manera natural mientras que, por el contrario, el segundo es totalmente forzado, tanto, que no hay ningún indicio de que pudiera surgir (vaya, que es totalmente gratuito). Eso sí, en ningún caso ambos roban protagonismo a la historia ni tienen peso en ella, pues se le dedica muy poco tiempo.


Por otra parte, los personajes están bastante caracterizados, a excepción de Cedric, quien, como protagonista, no aporta demasiado a la trama. En general, se aprecia cierta diferencia entre el yo infantil y el adulto de los protagonistas, y la relación y complicidad entre estos cinco amigos está muy bien construida.
Quienes tienen más peso en la historia son Lisa (antaño fuerte, valiente y decidida, pero algo más como adulta) y los hermanos Claudio (decidido y lanzado) y Dani (un artista sensible, melancólico y muy solitario), seguidos de Enma (sí, sí, habéis leído bien, con "n". Una chiquilla muy asustadiza pero capaz de todo por quienes le importan) y Cedric (algo retraído y sobreprotegido), a quien ya he mencionado. También cabe destacar a David, otro de los niños implicados en los sucesos de 1987 y que, desde entonces, lleva sumido en un mutismo absoluto.

Como personajes secundarios, es imprescindible mencionar a la agente Anabel, una mujer muy comprometida con su trabajo, y a Kevin y Leo, dos chicos responsables, tranquilos y obedientes.
Y, cómo no, a Bunny, el Cruel, un ser con aspecto de hombre y "máscara" de conejo, un ser paciente, manipulador, malvado y retorcido con muchas, muchas piedras a su disposición...


La narración se realiza en 3ª persona del pasado desde el punto de vista de distintos personajes, tanto protagonistas (los Supersónicos, en su niñez y adultez) como secundarios.
Asimismo, la novela se encuentra dividida en tres partes; la primera de ellas nos narra los hechos sucedidos en 1987, alternando dichos capítulos con lo que les ocurre en 2016 a los protagonistas antes de retomar el contacto; la segunda parte se centra en la investigación policial de las nuevas desapariciones y el trabajo de documentación que realizan los Supersónicos adultos; finalmente, la tercera parte supone el enfrentamiento final con Bunny y su resolución.

Lo peor de todo el libro es, sin ninguna duda, el ritmo, el cual es totalmente irregular durante la primera parte; por suerte, una vez pasada ésta, logra estabilizarse. Podría decirse que se trata de un ritmo pausado, pues, en ocasiones, parece que a la trama le cuesta avanzar.
Además, algunas escenas se solapan (algunas más que otras) debido al cambio de narrador y/o de escenario temporal, lo cual supone un desacierto en la primera parte, ya que rompe con la atmósfera de desasosiego creada previamente; incluso, en este caso, llega a resultar redundante.


Por último, el final es totalmente abierto, un gran punto a favor en este caso, puesto que, pensándolo bien, no podía ser de otra forma. Hay mucha menos acción de la que había esperado, pero, para mí, ha sido un final más que satisfactorio en ese sentido, al contrario de lo que ha ocurrido con algunas aclaraciones y descubrimientos finales (melodrama gratuito incluido), que incluso llegan a resultar confusos.
También tenemos un giro final bastante ¿perturbador? e inesperado y un epílogo marcado por el sarcasmo ácido de un personaje que no esperaba encontrar y el cual me ha encantado como narrador. Es más, este epílogo supone una profunda reflexión y una dura crítica sobre algunos aspectos de nuestra sociedad.


En resumen, Lo que habita dentro es una novela de terror, misterio y cierto toque de fantasía que encierra una profunda reflexión sobre la maldad y la humanidad. A pesar de su ritmo y sus fallos, consigue transmitir una sensación de aprensión e incertidumbre marcadas por la línea que separa la realidad infantil de la realidad adulta.

viernes, 23 de junio de 2017

Reseña El universo en tu mano (Christophe Galfard)

Título: El universo en tu mano

Autor: Christophe Galfard

Editorial: Blackie Books

Encuadernación: Tapa dura 

Precio: 23,00 €

Número de páginas: 455

Sinopsis: No estás solo en el universo. Y no estás solo en este viaje por el universo. Estás tumbado mirando el cielo en una playa cuando alguien te coge de la mano. Te guía en una odisea alucinante hasta los agujeros negros, las galaxias más lejanas y el inicio mismo del cosmos. Abandonas tu cuerpo y te desplazas a velocidades imposibles, te introduces en un núcleo atómico, viajas en el tiempo, entras en el Sol. 
No es que te expliquen el universo.  Es que lo tocas. No es que por fin entiendas el universo. Lo tiene en tu mano.

Opinión personal: Vale. No sé ni cómo ni por dónde empezar. Me he visto en la imperiosa y demasiado urgente necesidad de compartir y dar a conocer (más) este libro, de asegurarme de que, al menos por mi parte, esta gran joya llegaba todo lo lejos que podía. De que más gente tuviera acceso al increíble y fascinante conocimiento que contiene.

Empezaré por el principio, bien... ¿¡Por dónde comenzar!? Es que no os podéis ni hacer una ínfima idea de todo lo que implica esta obra... No nos habla ni de fantasía, ni de ciencia ficción (por mucho que a veces pueda parecerlo); nos habla de ciencia, de hechos, de conocimientos que, en la actualidad, ya poseemos. Y esto es lo que me parece más fascinante: el hecho de que es una realidad científicamente demostrada (al menos una parte de los datos; otros, simplemente, son meramente teóricos).

Me parece absolutamente increíble, magnánimo y maravilloso todo lo que estoy aprendiendo gracias a este libro. Y por eso quiero compartirlo con vosotros, para que la mayor gente posible tenga acceso también a tanto conocimiento. De verdad, es que me parece completamente alucinante.

Antes de nada, he de decir que se trata de ciencia divulgativa, apta para todos los públicos, por decirlo de algún modo, Si bien es verdad, si habéis estudiado ciencias, es posible que muchos temas los conozcáis, os resulten familiares, etc; pero, si no es el caso, no os preocupéis porque el autor se encarga de hacer fácil su comprensión por medio de ejemplos y diversas analogías, además, de un modo bastante distendido (en ocasiones, hasta casi cómico) pero sin perder el rigor.
Asimismo, nos promete, y cumple, que únicamente aparecerá una única ecuación en toda la obra: 
Es más, no os preocupéis si algunos temas no los entendéis para nada; de hecho, al no entenderlos, supuestamente vamos por el buen camino...

Nos encontramos ante una obra narrada en 2ª persona del presente, algo bastante inusual, pues el narrador (el autor) quien continuamente nos llama la atención y nos mantiene inmersos en la lectura, haciéndonos partícipes del todo. Y es precisamente gracias a esto que se consigue una total percepción de formar parte de algo grande. De formar parte de éste nuestro universo
Además, el libro se compone de: siete partes clara y perfectamente delimitadas, de menor a mayor complejidad; un epílogo a modo de resumen y de dimensiones épicas; y una bibliografía y un índice onomástico. A su vez, cada parte se compone de varios capítulos de longitud variable.

No sólo eso, sino que, en cierto modo, el autor nos plantea una pequeña especie de "trama" en la que el lector, junto con unos amigos, está de vacaciones en una isla tropical. Y es aquí donde comienza nuestro apasionante viaje a través del universo, mientras observamos el claro cielo nocturno en esa noche tropical. A partir de ahí, iremos descubriendo un sorprendente hallazgo tras otro, hasta el punto de que nuestros amigos, preocupados, comenzarán a plantearse nuestra cordura y se empeñarán en enviarnos a casa con nuestra tía-abuela... pero eso no nos detendrá, en absoluto.

Y, ahora, voy a soltar la caña, pues quiero que conozcáis algunos ejemplos tangibles de lo que podéis descubrir al adentraros en las páginas de El universo en tu mano. ¿Sabíais que...?:
  • Literalmente, procedemos de las estrellas. Sí; además del H y el He, el resto de los átomos de los demás elementos se forman en los núcleos de las estrellas y se liberan una vez éstas mueren.
  • Nada que contenga materia puede viaja a la velocidad de la luz; si no, correría el riesgo de ganar más masa progresivamente y terminar convirtiéndose en un agujero negro... 
  • Si consiguiéramos viajar casi a la velocidad de la luz, seríamos capaces de viajar al futuro, pero nunca al pasado.
  • El Big Bang no es el origen del universo, sino del tiempo y el espacio tal y como los conocemos. En cambio, el universo se remonta miles de años antes, hasta más allá de un punto en el que ni siquiera podemos inferir lo que habría ocurrido, debido a que las leyes de la naturaleza se encuentran sumamente retorcidas en dicho punto.
  • La antimateria se encuentra en todas partes, incluso dentro de nuestro propio organismo.
  • Lo que comúnmente denominamos "espacio-tiempo" es en realidad el tejido del que se compone el universo.
  • La gravedad no es una "fuerza" como tal, sino la curvatura que crea la materia en el espacio-tiempo.
  • La "nada" no existe. En su lugar, existen los campos cuánticos, que lo llenan todo.
  • La radiactividad se produce constantemente, por ejemplo, en el interior de la Tierra (de ahí su calor) o en nuestro propio organismo, pero a pequeña escala.
  • Podría decirse que las enanas blancas son estrellas... caníbales.
  • Los agujeros negros también mueren.
  • Teóricamente, la inflación eterna sería la responsable de la creación de múltiples Big Bangs. Como consecuencia, existirían los universos burbuja (universos dentro de universos dentro de otros universos, etc) y, el nuestro, podría ser uno de ellos (y ni siquiera sería el primero).
  • La teoría de cuerdas es...
  • Einstein era un puto genio.
  • Quiero volver a ver Interstellar.

Bueno, voy a parar aquí, que tampoco es cuestión de destripar el libro entero. Antes de nada, decir que espero no haber metido la pata en ninguno de los puntos, pues estoy tan extasiada escribiendo que... Si he cometido algún error, mi más sinceras disculpas e intentaré corregirlo cuanto antes.
Como veis, son unas verdaderas joyitas.

Espero, de corazón, que a alguien le haya picado el gusanillo de la curiosidad. Ya sólo por eso habrá merecido la pena el haber intentado poner orden en esta enmarañada amalgama de pensamientos que acabo de vomitar sobre la pantalla y el teclado.
La verdad es que lo considero un libro de digestión lenta, sobre todo para poder analizar y comprender con calma las implicaciones y consecuencias de todo lo que está escrito. A mí, personalmente, me encanta divagar y filosofar sobre ello; es el método que se utiliza a lo largo de todo el libro: los experimentos mentales o de pensamiento puro.

Finalmente, dicho esto, me despido. Ojalá coincidamos en este magnífico viaje por el universo. ¡Nos vemos en las estrellas!

En definitiva, El universo en tu mano describe un viaje apasionante por nuestro universo visible, indaga sobre su, nuestro, pasado, presente y futuro y nos lleva aún más allá, hacia los confines de la realidad, hacia lugares tan insospechados y dementes que cuesta imaginarlos y con los que, hasta hace poco, sólo podíamos soñar.